Hay momentos de la vida en los que pensamos que no podremos salir adelante, que nuestra vida laboral, familiar, social se ve levemente o gravemente afectada, en los que sentimos estar dentro de una habitación sin salida. El huir de estas situaciones, no es buena solución, a la larga nos debilita y nos predispone a otras huidas, muchas veces pensamos, "ya se pasará", "yo soy fuerte", "no necesito a nadie", pero el reconocimiento de un problema es lo que realmente nos ayuda a afrontarlo y nos hace más fuertes. El psicólogo no es un mago con una várita mágica que resolverá todos tus problemas, es un experto en salud mental que intentará ayudarnos, por nosotros mismos, a conseguir la estabilidad que necesitamos.
Existen muchos tabúes acerca de ir al psicólogo pero ir al psicologo no significa estar loco, ni que debas acudir siempre, ideas muy implantadas en la sociedad.
Mente y cuerpo están unidos y hay que cuidarnos.
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